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Carretera y manta… ¡y revisión!
¿Qué debo revisar en mi coche antes de salir de viaje?
¿Las vacaciones están a la vuelta de la esquina? ¿Tienes por delante muchos kilómetros en la carretera? Sea cual sea la circunstancia, antes de enfrentarnos a un largo viaje, los preparativos son lo más importante. Especialmente si esto se refiere tanto a nuestra seguridad como a la de aquellos que nos encontremos en nuestro trayecto.
Por ello, antes de partir, debemos efectuar un chequeo de nuestro vehículo. Para así asegurarnos de que todo está en orden. ¿Qué elementos de nuestro coche tenemos que revisar de forma indispensable antes de salir de viaje? A continuación os explicamos cuáles son las partes más importantes que no podemos pasar por alto antes de enfrentarnos a varias horas en la carretera.
¿Qué partes de mi coche tengo que revisar antes de viajar?
En primer lugar, hemos de tener en cuenta si el vehículo con el que vamos a viajar lo utilizamos de forma habitual o bien ha estado mucho tiempo en el garaje sin salir a la luz. Si es un vehículo de uso frecuente, el cual solemos someter a revisiones de forma constante, lo más normal es que todo esté en orden.
Sin embargo, si el coche que vamos a utilizar para viajar lleva demasiado tiempo sin ser utilizado, debemos prestar especial atención. Puesto que es probable que nos llevemos sorpresas desagradables en cuanto a su estado general. Especialmente si tenemos cientos de kilómetros por delante.
Por otro lado, si nuestro coche ha superado ya los 150.000 km y todavía no hemos visto que alguno de sus componentes no funciona bien, debemos ser cautos y estar pendientes. Porque alguna de sus partes podría fallar próximamente. Sobre todo si pretendemos someterlo a un largo viaje.
Hay algunos elementos que siempre que vayamos a efectuar un largo viaje en carretera deberíamos comprobar. Verificar estas partes de nuestro vehículo puede evitarnos problemas importantes en la carretera. Suponen una revisión mínima sobre el estado del vehículo para garantizar nuestra protección y la seguridad vial.
1. Comprobar los niveles generales de:
• Refrigerante: Es una de las claves para mantener la temperatura correcta del motor de nuestro vehículo. Hemos de comprobar que todo está correcto cuando nuestro coche está en plano y frío. Para confirmar el nivel de anticongelante siempre debemos hacerlo cuando la tapa del depósito que lo contiene está cerrada. El nivel del líquido será el adecuado si se encuentra entre el máximo y el mínimo.
De no ser esto así y si al llenar el depósito vemos que el nivel no sube, es posible que exista alguna fuga. Entonces hemos de llevar el vehículo al taller inmediatamente. No debemos olvidar utilizar siempre el anticongelante recomendado por el fabricante. Mezclar dos productos con propiedades diferentes podría causar futuras averías graves.
• Líquido de frenos: No podemos olvidar que el sistema de frenado de nuestro coche es el sistema de seguridad activa más importante. Un aviso que a simple vista puede alertarnos acerca de que el nivel de líquido no es el adecuado es si percibimos que el pedal de freno está más bajo de lo normal.
En función de cada clase de vehículo el tipo de líquido puede variar. Esto es importante porque la temperatura de ebullición es un dato muy significativo en esta revisión. Para ello se utiliza una probeta y un comprobador de líquido que mide también su temperatura. Si ésta se encuentra por debajo de los 190 grados, hay que cambiar el líquido de frenos.
Si observamos que el nivel de líquido se encuentra muy bajo en el depósito, lo más común suele ser que esto se haya producido por el desgaste habitual de su uso. No obstante, también puede deberse a la existencia de algún tipo de fuga; lo cual debe ser comprobado rápidamente por un profesional.
Además del líquido debemos estar muy pendientes del desgaste de las pastillas de freno. Los ruidos o chirridos del vehículo y de los pedales nos alertan de este tipo de problemas, los cuales tiene que solucionar un profesional lo antes posible.
• Aceite: El nivel de aceite, como ocurre en el caso ya mencionado del refrigerante, debe comprobarse cuando el motor esté frío y el vehículo se encuentre en una superficie plana. En caso contrario la varilla dará una medición inexacta.
Hemos de extraer la varilla, limpiarla en su totalidad con un trapo, volver a introducirla en el depósito del aceite y sacarla de nuevo. La mancha de aceite tiene que estar situada en medio de las dos muescas de la varilla, las cuales indican el máximo y el mínimo.
En caso de que necesitemos añadir más aceite, es muy importante usar el mismo tipo de líquido que ya hayamos utilizado previamente y que sea el que necesita nuestro coche. En caso contrario, la “viscosidad” del aceite podría cambiar y ocasionar problemas en el funcionamiento.
• Agua del limpiaparabrisas: Comprobar que hay líquido en el depósito de nuestro parabrisas es importante no solamente por cuestiones obvias de visibilidad, sino porque si no se encuentra en los niveles adecuados esto podría significar que existe alguna fuga en el circuito. El fusible podría estar quemado por el desgaste, el difusor atascado o la propia bomba del líquido obstruida.
2. Neumáticos:
¿La presión de nuestros neumáticos es la correcta? Debemos prestar especial atención a esta parte de nuestro coche. Por ejemplo, si el coche va a llevar mucho equipaje debemos aumentar algunas décimas la presión.
Asimismo, debemos asegurarnos de que no existen cortes ni grietas ni zonas excesivamente desgastadas. Es importante cerciorarnos de si los dibujos del neumático presentan o no un desgaste evidente. Incluyendo esta revisión en su cara interna, puesto que es una parte que a simple vista resulta más complicada revisar y no podemos pasarla por alto.
3. La importancia vital de ver y ser vistos:
Tenemos que chequear la salud de todos los elementos funcionales de nuestro vehículo en este sentido. Por ejemplo, la luz de cruce y la luz antiniebla. Un fallo en estos dispositivos no solamente puede poner en riesgo tu seguridad, sino también ser motivo de sanción por la DGT. Las luces de posición, intermitentes y freno no deben estar fundidas. Su limpieza y la correcta altura de su posición también son importantes.
4. Filtro del aire:
Este filtro impide que entre suciedad en el motor que pudiera causar averías. Debemos cambiarlo, como mínimo, cuando lo recomienda el fabricante de nuestro coche. Si el filtro se encuentra muy sucio podemos experimentar pérdidas en la potencia del motor. Y si esto se mantiene a lo largo del tiempo, el motor terminará por estropearse y acarrearnos problemas.
5. Aire acondicionado:
El funcionamiento del sistema completo, incluyendo el filtro, es muy significativo para mantener nuestro vehículo a una temperatura correcta. Puesto que esto puede influir en la conducción más de lo que imaginamos. Así evitaremos tener somnolencia durante el viaje o sufrir demasiado calor, por ejemplo. Si quieres saber más sobre la importancia de revisar el sistema de climatización del coche, entra aquí.
6. Prestar mucha atención al cuadro de mandos:
Debemos cercioraros de que no existen señales de alarma obvias. Esto es, que no hay ningún testigo que apunte alguna anomalía. En caso de que así sea hemos de comprobar el manual del fabricante y acudir al taller lo antes posible en caso necesario.
7. Amortiguadores:
Son un elemento fundamental en la suspensión, dirección y frenado de nuestro coche. Por ello, no debemos descuidarlos en ningún momento. Especialmente si vamos a pasar muchas horas en la carretera viajando. La máxima adherencia en la calzada nos aporta seguridad.
Si observamos que nuestro coche “rebota” demasiado o se balancea mucho en la carretera esto es una señal que indica que los amortiguadores no se encuentran en su mejor estado.
La ITV en regla es una gran compañera de viaje
Antes de enfrentarnos a un viaje importante en la carretera hemos de asegurarnos de que, además de haber realizado los chequeos técnicos pertinentes, llevamos toda la documentación en regla con nosotros: permisos de circulación, la tarjeta de la ITV y su correspondiente pegatina en vigor, el justificante de pago de la póliza del seguro, los chalecos reflectantes y los triángulos de emergencia, etc.
La ITV periódica en manos de profesionales como los que formamos parte de GRUPO IDV – ITV Services te ayudará a mantener tu vehículo actualizado respecto a la normativa. Tu seguridad siempre debe ser lo más importante. Para nosotros, lo es.
¿Estás ya listo para salir de viaje?